EL EX ALCALDE capitalino Marco Adán Quezada Martínez, tiene en este momento dos o tres apuestas para su futuro político, la vía de independiente, un mini partido o Morena.
Esos son los escenarios para Quezada, pero todos tienen su propia complejidad, pese a que el ex alcalde se mueve a placer como pez en río abierto, el secreto no revelado o su indefinición se despejará una vez que se conozca, qué es lo que quiere ser el ex alcalde, si es que considera seguir metido en política; lo que sí ha confirmado.
Ayer se reunió con el alcalde Independiente de Ciudad Juárez, Armando Cabada Alvídrez, lo que no es novedad, pues ya llevan varias y en todo caso lo que llama la atención es que asistieron varios de los seguidores cercanos de Marco Adán.
Si Cabada fuera el candidato Independiente, Marco tendría la candidatura a la alcaldía de la capital o una diputación federal en una de mutuo apoyo y ganar-ganar entre ambos.
En Morena las cosas se están complicando para Merco Quezada, pese a los buenos oficios de Fernando Tiscareño y su tía Bertha Luján Uranga, personaje muy cercano al Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Las cosas se complican más cuando Morena decide renovar su dirigencia nacional a través de encuesta de preferencias, en donde Yeidckol Polevnsky, lleva la de ganar, precisamente frente a la aspirante Bertha Luján, claro salvo que ya saben quién diga lo contrario.
Morena tiene muchas posibilidades de ganar la gubernatura, congreso y muchas alcaldías, de acuerdo con las encuestas publicadas en la semana, pero Marco no se ve, menos cuando la gubernatura y la alcaldía ya tienen nombres y hay muchos. Una diputación podría ser la salida.
La última vía es que Quezada vaya por la gubernatura, pero con un mini partido de los que ya existen o los que vienen como Redes Sociales Progresistas, el problema en esta posibilidad es que ninguno tiene alcance estatal y tampoco Marco Adán.
Retomando la hipótesis inicial, el futuro político lo conoceremos hasta que decida qué quiere ser, o mejor dicho a qué candidatura aspira.
ESTE SÁBADO inició la gira de dos días del presidente Andrés Manuel López Obrador, en los Municipio de Allende, Guachochi y Bocoyna en donde supervisará en donde supervisará los hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social en esas localidades.
El gobernador del Estado, Javier Corral Jurado, confirmó el acompañamiento en la gira presidencial, con o sin rechiflas, como sucedió en la reciente, por lo que a las 12:20 horas ambos harán un recorrido por el hospital del IMSS en Valle de Allende y por la tarde se trasladan a Guachochi.
Al día siguiente estarán en Bocoyna; de ahí volarán a la ciudad de Chihuahua y tan tan. Amlo a la CDMX y Corral a la verbena y colocación de un busto en honor de Luis Héctor Álvarez, personaje emblemático del Partido Acción Nacional.
Ojalá y que no sea como las siete anteriores, de solamente ver, escuchar y dejar pasar, en un país progresista, democrático, pacífico y del gran desarrollo económico, digo según sus números.
La Praxis:
Pena agenda y de los municipios mineros, resultó la asignación del Fondo Minero, después de la manipulación del Gobierno del Andrés López Obrador, con la “repartición” a las localidades mineras del país.
Resulta que los recursos que no aporta, el gobierno federal, sino las empresas mineras, fueron distribuidas, bajo criterios opacos y a Chihuahua como Estado le han enviado dos millones de pesos para repartir en una veitena de municipios en donde operan las mineas, que se llevan las riqueza local y ahora gracias al gobierno federal, pues no invierten y para tapar un bache de los muchos que general los grandes camiones de carga, por ejemplo.
Los alcaldes de municipios mineros van a recibir algo así como 100 mil pesos, lo que tampoco abona a la nómina de seguridad pública a la que las presidencias, están obligadas, más los daños a la ecología, y dotación de servicios médicos.
Ni pensar en temas de espacios deportivos, actividades de esparcimiento, dotación de agua potable y otros servicios que curbrían los municipios, con el fondo minero.
Desde luego que la culpa no es de las minas, sino la discriminación que para nuestro caso, realiza el gobierno federal, pues por ejemplo, a Sonora se le asignaron 124 millones de pesos, contra dos millones del Estado de Chihuahua.
Los alcaldes mineros dicen que se trata de un atropello del gobierno federal y como ya es característica del gobierno de Corral, una omisión e inacción, pese a que los alcaldes presentaron en tiempo y forma los proyectos ejecutivos a desarrollar, pero la 4T, dice no, en nombre de la corrupción y nuestro Jaco, pues feliz y motivado en el golf en el golf.
Resulta real y vergonzoso que municipios que deberían ser joya de la corona por lo que son y representan en la historia, se los coloque en el desamparo, por definiciones e inacción política, no hay que ir tan lejos, cerca de la capital está Aquiles Serdán; ahora se ha sumado Satevó, pero al sur la bella Santa Bárbara levanta la mano, más San Francisco del Oro, Parral, màs una decena de municipios serranos.