NO CABE duda que el gobernador Corral, está más que colérico con la repuesta del gobierno federal, para que los mandos de seguridad, esos que concentraba en Palacio de Gobierno los lunes, retornen como su nada hubiera ocurrido.
El gobernador se empeña en que los mandos federales, llámese Fuerza Aérea, inteligencia militar, Guardia Nacional y la representación de AMLO, se sienten en su mesa, pero nada ha hecho para que regresen, salvo acudir a la Corte, quien le dijo que sí, pero no le concedió los cómos, por lo menos no como antes.
Corral dice que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ordenó, ordenó la reintegración de la famosa mesa y que el Presidente de burla de la disposición de Suprema. La pregunta es qué esperaba el gobernador de una dictadura cuando ha impuesto la propia en Chihuahua.
El gobierno federal le ha dicho a Corral que si quiera coordinación, se presente a la Quinta Zona Militar, que es parte de la mesa, pero está ahí llega la concesión ferales, es decir, que el gobernador y se equipo de seguridad en el Estado, se cuadre ante los militares; cosa que conociéndolo no va a cumplir.
En cambio le va a faltar pasillo en el patio central de Palacio de Gobierno para tirase el piso, para llorar lo que el miso construyó, no sólo en las mesas de seguridad de donde expulsó al súper del Bienestar, Juan Carlos Loera de la Rosa, hoy candidato a gobernador por Morena.
Eso no es lo delicado, el fondo es que la Suprema Corte dictamina bien, pero el reporterito infantil, olvida que un desafía presidencial en la CuartaT, se convierte en una afrenta que no se perdona, por López Obrador, pese a la Suprema Corte o lo que después exista.
De nuevo Corral, en los hechos demuestra que lo de él y su equipo no es lo jurídico, pero tampoco lo político.
POR SI a alguien le quedaba alguna duda de que la campaña de vacunación Covid de la Presidencia de la República es electorera, ahí les va: el candidato de Morena, Juan Carlos Loera, ya lo agarró de bandera, también.
Como muchos en el país, denunció lo que es un secreto a voces, que la estrategia de vacunación es eminentemente con fines electorales, tanto que es el principal spot de Morena de cara a las elecciones.
Además, los parásitos, perdón “siervos de la nación” que forman parte de las brigadas de vacunación, pedían y fotografiaban las credenciales de elector de los abuelitos vacunados en franca violación a la Ley Electoral. Afortunadamente ya se los impidieron.
A lo largo y ancho del país, candidatos de Morena usan la campaña de vacunación para crear mensajes “de apoyo” a la estrategia de la Presidencia de la República.
Pues ayer, Juan Carlos Loera publicó en su cuenta de Twitter: “En #Chihuahua está avanzando la vacunación de personas adultas mayores. Primero en 10 municipios, los de mayor marginación. La adquisición de vacunas de forma oportuna y gratuita solo ha sido posible sin corrupción y poniendo primero la voluntad de proteger la salud del pueblo”. Nada más.
Así que haciendo focha y todavía no inician las campañas.
LA DIRIGENTE del Partido Verde Ecologista Mexicano, María Ávila Serna, quien ha sido señalada como exdiputada duartista, afirma estar muy tranquila de las acusaciones de ser parte de la nómina secreta del exgobernador Duarte.
Dice que todo se trata de un mero trasfondo político y que pronto saldrá la verdad.
Como es sabido, María Ávila es señalada junto con la candidata del PAN a gobernadora, Maru Campos y el también exdiputado priísta Rodrigo de la Rosa, de haber recibido mucho dinero de la nómina secreta de Duarte.
A María Ávila no le quita el sueño la acusación del Estado y afirma que pronto dará a conocer la razón de esa tranquilidad. Esto le da un nuevo giro a las acusaciones contra la panista Maru Campos.
Eso sí, dice que no ha sido sencillo estudiar las más de 26 mil hojas de que consta el expediente y aún no encuentra en dónde es donde está señalada o acusada.
La audiencia por el asunto de la nómina secreta está fijada para el día 24. Hasta ahora, la defensa ha logrado aplazar la imputación de cargos.
