SE SUPONE que es cosa de oficializarlo, pero todo apunta a que el excandidato al gobierno del estado por Morena, PT y Nueva Alianza, regresa a la delegación estatal de Bienestar, que a la vez, opera como la representación en el estado del Gobierno Federal.
El ex candidato, se reunió con el presidente López Obrador en durante la reciente gira a Ciudad Juárez, en donde, se dice, recibió el encargo del presidente.
De hecho en este mismo espacio se informó hace 15 días, que la actual delegada del Bienestar, Martha Alcalde Luján, habría presentado su renuncia irrevocable para reintegrarse a sus labores en el gabinete de la gobernadora de la CDMX, Claudia Sheinbaum.
Loera de la Rosa, luego de la terrible derrota electoral, se integró a Congreso Federal, hay que recordar que en la elección de 2018, fue electo como diputado federal, aunque, casi todo el período se la pasó con licencia.
Ahora retorna, suponemos con un nuevo panorama y con conocimiento de causa de lo qué es y ocurre en Chihuahua.
Ojalá que los enconos postelectorales hayan sido superados, incluyendo la ira en contra de los productores de los 19 municipios de la cuenca del Conchos, incluyendo Aldama, Coyame del Sotol y Ojinaga.
BUENO en los ecos de la gira presidencial por Ciudad Juárez y Ahumada, el presidente López Obrador, por lo menos ya reconoció que la inseguridad y violencia, son los problemas principales de la frontera y la región.
De hecho este lacerante mal, se registra casi en todos los municipios de la entidad, con excepciones desde luego, pero se trata por desgracia de una problemática generalizada.
“Vamos poco a poco a serenar a Juárez”, es dicho presidencial, ojalá y se cumpla; ya cruzó la mitad de sexenio y las muertes de alto impacto ya superaron las gestiones presidenciales, la de Calderón y Peña Nieto.
“La guerra no funcionó, ahora vamos a construir la paz”; por desgracia tampoco ha funcionado.
HAY UNA real polémica y posicionamientos encontrados sobre el regreso presencial a clases en sus diferentes formas y/o modelos.
La desinformación se genera ante el anuncio hecho por el gobernador Corral que ha ordenado un regreso obligatorio, pero lo dejó en decreto verbal.
No dice y mucho menos explica el cómo será el regreso y aunque afirma que los planteles están listos, la verdad es que no hay condiciones, pese a los manifestaciones en favor o en contra.
A Corral le quedan 28 días para dejar la administración y en ese tiempo es imposible coloca en condiciones a los mil 700 planteles de la entidad. Es más ni siquiera se podrían sanitizar, lo que sería el primer paso.
Menos colocar los filtros, arcos o casetas sanitarias, los termómetros y el gel antibacterial suficiente.
Olvidémonos de otras condiciones necesarias, para un buen regreso de los niños a las aulas.
El regreso escolar por lo tanto, aunque es necesario, por lo pronto deberá de esperar.
Una comisión especial del equipo de transición de la gobernadora electa María Eugenia Campos Galván, está analizando el tema.
Por lo tanto será la próxima gobernadora quien tome la decisión, lo de Corral ya es sólo cosa de estar moliendo.
El posicionamiento de Campos Galván, será que no habrá tal regreso el próximo 30 de agosto. Al tiempo.
