LA NOVEDAD del semáforo la pandemia del Covid, no es que el estado Chihuahua continuará por le menos 15 días en color verde, sino que ya no habrá colores pasteles y muchos menos inventados como lo hacia el gobernador Corral cuando estaba en funciones.
En Chihuahua se retoman los colores originales y mientras no se supere los mil contagios por semana, así continuará, salvo claro, que haya saturación hospitalaria. La semana pasada se presentaron 665 contagios, un número alto, pero como dicen los epidemiólogos, hay vamos,
Lo nuevo es que en las próximas semanas, se tomará el modelo de la Universidad Autónoma de Chihuahua, en donde el color del semáforo se aplicará de manera regional con el que se busca acotar las zonas con mayores contagios, sin afectar el resto.
Permitirá además, focalizar el problema de salud y atenderlo por atacarlo de manera inmediata y con mayores recursos médicos e insumos y no de manera atomizada y generalizada como ocurrió durante los recientes 18 meses.
Las tres medidas básicas de prevención de toda la pandemia quedan vigente, es decir, la sana distancia, la higiene de manos y el cubrebocas que es obligatorio, y que pese a cárcel, nadie quiere arrestar, prefieren encarcelar a periodistas,
Los aforos también continúan igual, aunque se pueden presentar variaciones de acuerdo con los giros y bajo análisis casuísticos.
En lo que se refiere a clases presenciales éstas permanecerá, ante algún contagio se suspenderá la asistencia en el grupo que se haya detectado y si se llega a cinco grupos se cierra el plantel de manera provisional, hasta que se demuestre la desinfección y la recuperación de los afectados.
LAS CHICAS de verde, las que están a favor del aborto y otras ideologías fuera de la ciencia y la tradición familiar, brincaron la delgada línea entre una protesta/manifestación por sus creencia y cayeron en el vandalismo demostrado.
En su marcha, otra vez, dañaron con sus pintas monumentos públicos y edificaciones de empresas privadas. Seguramente eso es lo que les interesa y eso les encargan desde la madre patria. Desde España, del comando Barcelona.
Como que ya les gustó dejar su firma en firma a su paso, en donde lo central ya no fue su legítimo expresión a favor del aborto; menos el debate de ideas y menos argumentos.
Parecería por lo menos así se percibió, que lo de las chicas de verde (y negro), sin que sea contradicción pretendían visibilizarse desde el anonimato.
Sacar fobias desde el rostro cubierto y dañando patrimonios que son de todos (incluyendo de las manifestantes) y en donde se tienen que destinar varios millones de pesos para más o menos limpiarlos, como recurrentemente ha ocurrido con Palacio de Gobierno, la Glorieta de la División del Norte y hasta la estatua del Centauro del Norte.
Que culpan tiene los edificios públicos, los monumentos, iglesias o empresas periodísticas para que se dañen de esa manera. La respuesta es ninguna.
Tampoco, nada van a ganar haciéndolo; lo seguirán haciendo mientras no entren en conciencia de que con estas acciones se daña a todos.
Tampoco se puede esperar mucho de estas manifestaciones, en donde de fondo un rayoneo sería lo de menos, cuando esta ideología ponen en riesgo dos vidas.
POR LO pronto ya le informaron al alcalde morenista de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, que no hay posibilidades o más bien dicho, no hay condiciones para la Junta Municipal de Aguas (JMAS) pase a manos del Municipio.
De entrada se sabe que es el quebranto del gobierno estatal herencia de Corral, es la razón principal y que las JMAS, que como lo hemos dicho que de municipales sólo tienen en nombre, es un ingreso que significan arriba del los mil 500 millones de pesos el año para el Estado.
Desde luego que hablamos de las 67 JMAS en la entidad, es un recurso muy importante que la gobernadora, María Eugenia Campos Galván, no va a dejar ir, menos en la Junta de Aguas más importante, la de Ciudad Juárez.
Al alcalde Cruz Pérez Cuéllar le van a decir que no, que por ahora no y así transcurrirá en el sexenio de Campos Galván, lo que no se concibe, planea o en voluntad manifiesta se acredita, no va a suceder, sólo hay que mirar al gobierno federal como en Suiza, Noruega, el famoso avión presidencial y los gasolinazos.
Pérez Cuéllar dice que va a apechugar y que en el intento nada se pierde. Bien por el alcalde que de chairo tiene poco.
