AHORA NO queda duda que el agua de las presas de la región centro sur no le interesó al gobernador Javier Corral y lo más graves ni el asesinato de la agricultora Jéssica y menos los cuatro detenidos por defender lo que les pertenece.
Se trató sólo de una simulación como muchas tantas de Corral cuando convocaba a los productores a firmar acuerdos, minutas en las que se les garantizaba el agua, el ciclo agrícola pasado y el presente, pero fue un engaño.
Lo mismo sucedió con el grupo de abogados que les ofreció a los campesinos detenidos, no hicieron nada, y tampoco llegó la ayuda para Jaime, esposo de Jéssica quien sigue postrado por las lesiones que padece luego de ser atacado con armas largas por elementos de la Guardia Nacional.
Ni defensa, ni gestión ni negoción política, realizó por los suyos el exgobernador, sólo simuló y muy al estilo los abandonó, como lo hizo con su partido y sus círculo cercano.
Ahora la buena nueva es que el conflicto por el agua llegó a su conclusión tras un acuerdo entre la gobernadora María Eugenia Campos Galván y el secretario de Gobernación Adán Augusto López Hernández,
Lo mejor de acuerdo es que también se revisará los casos de los detenidos para que alcances su libertad luego incomprensibles acusación de atentar contra el estado y terrorismo.
Hay que decirlo que a la gobernadora realizó tal logro a una semanas de haber asumido el cargo. La clase estaba en la voluntad para hacer las cosas así de claro y sencillo.
Ahora hay que ver esperar a que el acuerdo se cumpla, no vaya ser que sea otra de las tretas de la CuartaT.
ES COSA y de que la gobernadora Campos Galván, lo reconfirme para que Simeón Esparza, asuma como coordinador estatal de la Secretaría de Seguridad Publica en el Estado.
Esparza sería el jefe operativo o el comisionado como antes se le conocía a esta posición en la que estuvo Oscar Aparicio y fue sustituido en el último año por Álvaro Cuauhtémoc Serrano.
Se trata de una posición estratégica y de gran operatividad. La propuesta llegó al despacho de la gobernadora directamente del Secretario de Seguridad Gilberto Loya Chávez.
Se nota que el secretario va por su gente, por las lealtades y mandos que fueron parte de su equipo cercando cuando se desempeño como director de Seguridad Pública Municipal en Chihuahua, capital.
Esparza escaló varias posiciones en la Seguridad Pública Municipal, participó en el proyecto Escudo Chihuahua, en la Certificación Calea y hasta hace unos días estaba de titular en la Dirección de Formación Policial.
Es criminólogo de formación y con participación activa en los programas de formación.
Pero lo más importante para el caso es que es de todas las confianzas del secretario y seguramente de la gobernadora.