ESTE día a las 11 horas la gobernadora María Eugenia Campos, presentará a los chihuahuenses el esperado Plan Estatal de Desarrollo, en el que se conocerán los seis ejes principales del quehacer de la administración estatal, para lo que resta de su Gobierno.
Se presenta a unos días de que el gobierno de Campos Galván, llegué a los primeros seis meses, en los que ni se ha ordenado la casa, como prometió, y en un periodo en el que el tema de recaudación de recursos se ha presentado de manera hasta voraz y sin ninguna obra pública en proceso, es más ni siquiera inaugurada.
Se entiende que la mandataria recibió un gobierno en total desorden, sobre todos en lo financiero, con boquetes millonarios e inexplicables y una anarquía en todas las áreas, herencia del exgobernador Javier Corral Jurado.
Pero, hay que remarcar que si bien desde el inicio de la administración se buscó y desarrolló una o varias estrategias para darle sustento a las finanzas estatales, también se recurrió a nuevos endeudamientos sobre los 18 mil millones de pesos.
Capos Galván presentará el documento que tiene que ver con finanzas sanas, inversión en infraestructura, educación, salud, desarrollo humano y seguridad, en donde están puestas todas las expectativas de los chihuahuenses, por lo menos esa es la apuesta.
Maru tendrá el escenario que se ha preparado con un acto faraónico con una asistencia calculada en 10 mil, lo que se antoja exagerado, en los tiempos de pandemia.
Así se planeo y seguramente así, ya sabemos que la gobernadora gusta de este tipo de concentraciones, de los positivos comentarios y de los aplausos.
SUPONEMOS y así se entiende que la presentación de su plan sexenal, se convertirá de manera natural en el parteaguas; en un antes y después, por ahora con la marea a favor en el sentido de que las cosas serán mejor para Chihuahua.
Desde luego después de un sexenio tormentoso caracterizado por la corrupción y otro que nada lejos está del primero, en el quinquenio, en donde la cerrazón, los lujos, la holgazanería y la soberbia se impusieron.
El estado ya no resiste otro sexenio de corrupción y simulación, pero además no es deseable. Campos llega a seis meses, con pronósticos favor, decíamos, pero con un crédito electoral que se agota.
Sí bien se le reconoce su gestión, negociación y acuerdos que llevaron a casa a los tres agricultores acusado de manera injusta de terrorismo y al líder de productores e Meoqui, Andrés Valles Valles, por la legítima defensa del agua de las presas de la región centro-sur del estado.
También hay que decir que, la inseguridad en el estado se presenta de manera exponencial, más las bolas de nieve que significan, el caso del presunto fraude de la financiera Aras y el brote de corrupción que crece y crece en la Junta de Aguas y Saneamiento de la capital en coparticipación con la legislatura pasada y
Temas que al final de día están vinculados en donde la gobernadora y la Fiscalía General del Estado les dan más largas que a la cuaresma que hoy inicia, porque, o no saben procurar justica o de plano no hay voluntad.
POR alguna razón el viejo lobo de mar, Jaime García Chávez, juraría con mano sobre la biblia que al exgobernador Javier Corral Jurado, se le va a respetar y no se le va a tocar ni un pelo, menos del bello de su pinochezca nariz.
Evidentemente el exdiputado, exdirigente del PRD y activista aún en su séptimo escalón en cronología de vida, jamás juraría y menos sobre una biblia, su asteísmo no lo permitiría.
Pero evidentemente y comprendido en dicho popular, “mas sabe el diablo por viejo que por diablo”. García Chávez sabe de lo que habla y sin filias ni fobias, conoce que Corral Jurado tiene información real de los moches duartistas, en donde la lista incluye a perredistas, empresarios, panistas y demás.
Sostiene que los moches fueron reales y señala a la perredista Hortensia Aragón, a flamante subsecretario Pavel Aguilar, a Cruz Pérez Cuéllar y otros como receptores de esta distribución de recursos oficiales, en donde por cierto, ninguna fue procesado, en un sin razón de la supuesta lucha en contra de la corrupción de Corral.
Lo delicado del tema, más cuando desde la izquierda radical y tal vez auténtica, se diga sin decir que la gobernadora Campos estaría en esa lista.
García Chávez ciertamente encaró muchas batalla digamos similares, se entiende que otras sexenio, estaría en chino, pero también que en otros gobiernos ha sido parte de la nómina o listas gubernamentales con o bajo la idea se convierta en una piedra en el zapato.