EL PRESIDENTE López Obrador, vuelve como le gusta, a estar en el ojo del huracán. Ahora lo hizo con el paquete de 20 propuestas de reformas, algunas constitucionales, otras intrascendentes y otras electoreras.
El objetivo al final del día es llamar la atención y darle un levantón a su candidata al Gobierno de la República, Claudia Sheinbaum Pardo.
La candidata ya dijo que va gustosa por las reformas; sin lugar a dudas, van a ser parte de su plataforma electoral, durante la campaña, ya está marcadito el camino.
Las propuestas (de Reforma) de López Obrador, están centradas en los apoyos gubernamentales en becas, pensiones que de hecho ya existen, pero es necesario motivar el voto de los pobres como en algún momento lo aceptó, incluyendo eso de servicio médico gratuito para todos.
Las que no tienen razón de ser, son la prohibición de vapeadores, fontanillo, que ya están prohibidos; así como regresar a la CFE su calidad de empresa estratégica nacional, lo que nadie le ha quitado.
La Reforma Electoral, definitivamente hay se quedará, pues no se pueden hace modificaciones, cuando hay un proceso electoral en curso, como es el caso.
Y al final el gran debate legislativo, se centrará en la desaparición de los organismos autónomos, la elección por voto popular de jueces y magistrados y la militarización del país. Ahí está en meollo del asunto, lo demás es una abierta “intromisión” a modo, en la campaña de Sheinbaum Pardo.
EL EXGOBERNADOR del estado César Duarte Jáquez, será sometido a una intervención quirúrgica a corazón abierto, en la Ciudad de México.
Desde ayer iniciaron los trámites judiciales y desde luego médicos para el traslado y operación del exmandatario, quien ahora, dicho por sus abogados presenta un deterioro importante en la salud.
Hace unos meses se le detectó una falla en la válvula mitral, lo que implica un mayor esfuerzo en al bombero que realiza corazón, lo que a su vez provoca taquicardia y un sobre esfuerzo de este músculo.
Duarte sería intervenido el próximo mes, sin que hasta ahora haya fecha definida, por un grupo de especialista de Chihuahua y de la Ciudad de México.
DICEN que los superamigos de ayer; hoy amigos en la distancia, Alejandro Domínguez y Marco Adán Quezada llegaron a un gran acuerdo entre caballeros.
Desde luego el supuesto pacto aplicaría, cuando Marco Quezada, sea designado candidato para el Distrito Federal 08 por Morena, el mismito por el que participará Alejandro Domínguez, por el Frente Amplio por México.
Son amigos, ya no tan cercanos o frecuentes como hace varios ayeres, o desde que Marco se fue del PRI, pero la comunicación por lo menos existe.
El pacto que dicen acordaron, es en lo general no atacarse; en lo particular que Marco no recuerde que Alejandro demandó a la ahora gobernadora Campos Galván, por los moches de César Duarte.
El cambio de la moneda sería, que el dirigente priísta no toque el tema del accidente de aeroshow y de la troca moustro.