LA GOBERNADORA del Estado Maru Eugenia Campos Galván, firmó el Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad, una iniciativa enmarcada dentro del Plan Nacional Hídrico 2024-2030 del Gobierno de la República.
Seguramente la mandataria acudió ante una invitación formal del despacho de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo; debió de cubrir las formas de la cortesía, que al final de cuentas son fondo.
Aunque la buena voluntad quedó demostrada, digamos por parte del Estado de Chihuahua; la mala voluntad también quedó plasmado si se toma en cuenta que para variar, el Plan Hídrico de Sheinbaum, no contempla ni sólo centavo para la entidad.
El plan con pomposo nombre de sustentabilidad y acogedor del derecho humano al agua, no aporta ni el uno ni lo otro. La Federación ya demostró que el agua se la arrebata a Chihuahua con el uso del Ejército, la represión y muerte.
Los de sustentable, tiene que ver con la tecnología, conservación y gestión del agua, pero no habrá recurso económico que destine para tal fin, como tampoco lo hubo en el sexenio pasado de López Obrador.
Maru Campos firmó a ciegas el documento o no quiso leerlo, en el que se autoriza la revisión de las concesiones y la reasignación en su caso, lo que en español significa que vendrá una nueva guerra por “la posesión” del agua, con una complicación mayor cuando existe un Poder Judicial tronado al que puedan recurrir quienes se vean afectados.
De ese tamaño fue la firma de la gobernadora en el Acuerdo Hídrico; nada para Chihuahua, pero con la posibilidad de que se presente despojos sobre todo en las zonas de riego del subsuelo o rodada se las presas.
EN EL TEMA de robos bancarios, llamó la atención que en pasado fin de semana que casi de forma consecutiva, entre el viernes y lunes pasados, se registraron dos asaltos a instituciones bancarias.
El alcalde de la capital Marco Bonilla Mendoza, tiene en la estadística tres asaltos a bancos en su pasada administración y la presente con detenidos por parte de agentes de la Policía Municipal.
El registro de eficiencia sería de 100 por ciento en la resolución de estos delitos, lo que es muy importante, si se toma en cuenta que luego estos, se convierten en una incontrolable epidemia.
Algo deben de tener de magia los bancos, en donde de volado se resuelven los casos, lo que evoca el dicho de que cuando se quiere se puede.
Pero en donde no se ha podido lograr ni siquiera un 40 por ciento de eficiencia, es en asalto o robo a locales comerciales y casas habitación; tal vez, porque son muchos; ya son epidemia, o por alguna extraña razón, no se priorizan como los bancos, la mayoría por cierto, sin seguridad privada.
YA ENTRADOS en temas de seguridad, el Municipio de Chihuahua podría adquirir el año entrante las “Pulseras Centínela” para protección de jovencitas que acuden a antros y pueden se colocarse en situaciones de vulnerabilidad.
Se antoja como una buena medida de protección para las chicas, ante situaciones que en los hechos, están presentes en muchos de estos lugares, donde su integridad física, puede estar en riesgo o hasta en el traslado de ida y vuelta.
El anuncio hecho por el alcalde Bonilla, retrotrae la pregunta de qué fue primero: El huevo o la gallina, si se toma en cuenta que hace un par de semanas el Cabildo de la capital, aprobó los protocolos de protección para las jóvenes que acuden a este tipo de sitios.
Aprueban un dictamen en el sentido de los protocolos, es decir, el marco legal; muy rápido se anuncia la adquisición del instrumento que sería garante o parte de la seguridad, planeado o no, vaya usted a saber.
Demasiada chulada para ser real, o es, sólo la desconfianza natural en contra de los viejos y nuevos tiempos de los políticos o sus políticas públicas.