Por José Luis JÁQUEZ BALDERRAMA
CHIHUAHUA CHIH.- Nicolás Maduro asumió su tercer mandato consecutivo en Venezuela, sin importarle las nutridas protestas ciudadanas, las acusaciones de fraude electoral y el aislamiento internacional.
A pesar de la falta de legitimidad reconocida por gran parte de la comunidad internacional, incluyendo a Donald Trump, la dictadura se ha mantenido gracias a un control férreo de las instituciones clave, como los órganos electorales, el poder judicial y las fuerzas armadas.
El encarcelamiento y expulsión del país de opositores al “chavismo” principalmente de periodistas y políticos críticos; la falta de condiciones democráticas han sido elementos fuertemente cuestionados por los Estados Unidos, la Unión Europea. la ONU y la mayoría de los mandatarios de América Latina. El gobierno de México no ha tomado partido, aunque mandó un representante a la toma de protesta de Maduro.
Aunque hay países que respaldan al régimen” chavista”. como Rusia, China, Cuba, Nicaragua, Bolivia, donde “reina” la oclocracia, un tipo de gobierno, donde un personaje manda sin restricciones de la mayoría y su voluntad es “ilimitada”. Se descarta, por tanto, la idea de la división de poderes, del estado de derecho, la libertad de expresión y la noción de la república.
El dictador se aferra al poder, ante un clima de alta tensión política interna e incertidumbre.
Cabe señalar que en las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio del 2024, Maduro aseguró que ganó con “la mayoría de votos”. Un proceso amañado, del que no se conocen las actas electorales.
“Con la usurpación del poder por parte de Nicolás Maduro (…), apoyado por la fuerza bruta y desconociendo la soberanía popular expresada contundentemente en las urnas, se ha consumado un golpe de Estado”, dijo en un comunicado la principal coalición opositora, la Plataforma Unitaria.
Durante los días 9 y 10 de enero del presente año, las protestas se han incrementado en la mayor parte de las ciudades de Venezuela, con la participación directa de la principal opositora María Corina Machado, quien habría sido detenida por fuerzas del gobierno, pero luego fue liberada. Dio un contundente mensaje; “ni un paso atrás”.
El gobierno venezolano ordenó el cierre temporal de la frontera terrestre y el espacio aéreo con Colombia, acusando una supuesta “conspiración internacional” para desestabilizar la nación.
Desde que llegó al poder el “chavismo” Venezuela ha atravesado por una profunda crisis económica caracterizada por una recesión prolongada, hiperinflación, escasez de productos básicos y una fuga masiva de venezolanos que ha llegado a superar los siete millones, de acuerdo a cifras de la ONU.
Ahora bien, la relación de Maduro con Donald Trump, no es buena, pues hay que recordar que en su primer mandato, el presidente de los Estados Unidos impuso severas sanciones económicas y un embargo petrolero y ha dejado claro que seguirá con su política de presión. Bueno, pocos países escapan de esta amenaza.
María Corina Machado, la líder opositora a las que las autoridades venezolanas no dejaron participar en las elecciones presidenciales, pidió a sus seguidores vencer el miedo provocado por las más de 2.000 detenciones registradas tras los comicios y los numerosos casos de tortura, amenazas y desapariciones.
“Llegó la hora (…) Todos sabemos que esto se acabó”, dijo al pedir a sus compatriotas a salir a las calles para manifestarse en contra de la posesión de Maduro.
“Que el miedo nos tenga miedo”, enfatizó.